Capitulo 51

Mac estalla en júbilo.
--¡papá, voy a ser papá¡
Tras el primer momento de sorpresa, esa noticia hace muy feliz a Mac. Abraza a su amada que sigue en la camilla.
--¡verás que alegría se llevará mi padre¡ ¡¡su primer nieto¡ ¡¡El primer nieto de Demetrio de …¡
Denise lo besa para que no siga hablando aunque sabe perfectamente que tanto el doctor como la enfermera saben quienes son ambos y que dentro de poco todo el pueblo lo sabrá. Tanto el doctor como la enfermera fulmina a ambos por la mirada. Mac es muy cariñoso con Denise.
--sé que ha sido algo inesperado para ambos pero… --Mac.
--si claro… --interrumpe la enfermera burlona.
Mac no entiende lo que pasa.
--¿nos dejan solos? –pregunta Denise a la enfermera y al doctor.
Mac mira al doctor:
--¿Me puedo llevar a mi mujer?
El doctor hace que sí con la cabeza y se lleva a la enfermera arrastras que no quiere irse para no perder ese chisme tan bueno. Mac ayuda a levantarse a Denise, la besa, le acaricia el vientre. Está feliz porque al ser el primero de sus hermanos en darle un nieto a su padre eso le pone en ventaja sobre Sergio, además ama a esa mujer y ahora nadie lo separará de ella. Mac ríe, grita, salta.
--¡Papá, voy a ser papá¡
Llevar en su seno el hijo de ese hombre es toda una bendición, cada vez piensa menos en su ambición. Ese embarazo es tan diferente a todos los anteriores. Es lo que quería pero sabe que en pocas horas Mac sabrá que ella es Denise y no sabe que tal reaccione. Además nunca se había mostrando tan abiertamente su romance con un De La Colina y tampoco quiere que su familia lo sepa. Acaricia a Mac llena de ternura, le duele perderlo. Nunca le dolió cuando uno de sus amantes la dejó pero ha sido muy feliz en sus brazos, feliz de verdad y no soporta la idea de tener que vivir sin ese hombre. Le emociona la alegría de él ante ser papá.
--No grites, se va a enterar todo el mundo.
Mac tiene la ilusión escrita en la cara.
--¡Es que quiero que se entere todo el mundo¡
Supone que la preocupación de Denise es porque no esperaba ese embarazo, porque aunque él la ama, aunque está seguro que es la mejor de su vida apenas se conocen. Apenas llevan un mes acostándose juntos y no han hablado apenas. Es muy amoroso con ella.
--Yo sé que tú me amas y que todo ha pasado muy rápido pero ha sido intenso como es nuestro amor, ahora ya no nos tenemos que ocultar ¡¡que todo el mundo sepa que nos amamos, que estamos juntos¡
--¿y qué van a pensar de mi?
Él abraza a la mujer:
--es cierto, ¡¡nos casamos¡ ¡mañana mismo si se puede¡
--No es tan fácil.
Ella habla con tristeza. Le gustaría ser una mujer libre, casarse con ese hombre y no sólo por la herencia. Él la acaricia:
--¿y qué te lo impide?¿qué es lo que pasa?
Ella le pone la mano en la mejilla. Él se estremece, siente el amor de ella.
--Ahora no, mañana te cuento todo.
Denise quiere tener esa noche para pensar en la mejor estrategia. Le ha dado vueltas a lo mismo en esos días pero no tiene nada claro, tampoco pensaba que la noticia de su embarazo sería de esa manera.
--almenos dime como te llamas. Suerte que aquí no me lo han preguntado, ¿te conocen?
Ella lo besa para callarlo.
--júrame que no le vas a contar a nadie que vamos a tener un hijo hasta que mañana yo hable contigo.
--si claro.
Van saliendo juntos. Denise quiere que cada uno vaya por su lado.
--¡no te puedo dejar sola¡ ¡yo te acompaño a tu casa¡
--No, por favor. Déjame hacer las cosas a mi modo.
--¡pero no puedes irte sola, además vamos a ser papás¡ ¡¡quiero estar contigo¡
Ella lo besa y eso lo vence.
--por favor –le suplica.
A él le cuesta mucho separarse de ella. La besa, le pone la mano en el vientre.
--Te amo.
Ella le da un pequeño empujón pero con cariño.
--ya vete.
Él le da un dulce beso y ella lo disfruta. Sólo espera que Mac no se entere de la verdad hasta que ella haya inventado algo. Mac se va deprisa, contento. Ella suspira. Es tan guapo y nunca un hombre la había hecho sentir tan llena, tan mujer, tan feliz, tan viva. Cuando está en sus brazos ni el dinero de Los De la Colina le importa.

Por otro lado, Rubén despierta desnudo en el río. Le duele mucho la cabeza.
--¿¿Thiago?
Se sorprende al verse con los pantalones y los calzoncillos bajados. La sangre.
--¿¿qué demonios es esto?
Se horroriza al ver el condón usado a su lado.
--¡Esto no es mío¡ ¡¡que me hicieron¡
Rubén se levanta, se toca por detrás para ver que todo esté bien, para ver qué le pueden haber hecho esto.
--¿¿porqué Thiago me dejó solo?¿qué ha pasado?
Rubén está muy angustiado.
--¡todo esto tiene que ser una broma¡
Son muchas las cosas que se le pasan por la cabeza. Tiene que aclarar las cosas. Se monta en su jeep y se planta en la casa de los Montesinos. Es Thiago el que abre. Él está nervioso.
--¡sabía que vendrías a buscarme después de lo que pasó¡ ¡me has hecho tan feliz¡ --le dice Thiago a Rubén al ver que es él.
Rubén lo agarra del brazo. Lo aparta de la casa. Se ve alterado.
--¿¿se puede saber qué pasó?
Thiago lo acaricia en el torso, se muestra apasionado.
--hicimos el amor.
Rubén se lleva las manos a la cabeza. Sí, es lo que parecía, que un hombre ha abusado de él y si eso ya le parece horrible es monstruoso que haya sido su propio hermano. Se queda en shock. Casi desvanece.
--No es posible, tú no puedes haberme hecho una cosa así.
Rubén se va apartando de Thiago, no permite que lo toque.
--Lo que hicimos lo hicimos los dos.
--¡no, yo me quedé dormido¡¡me violaste¡
Y decir esa palabra es como si un puñal le atravesara el alma. Thiago no lo niega. Por los ojos de Rubén deslizan lágrimas de sangre.